Balmacedistas
José Manuel Balmaceda
Inició su gobierno con un ambicioso plan de obras públicas y con el ideal político de unir a los liberales en un solo gran partido. Pero pronto inició un enfrentamiento con el congreso por la pugna entre presidencialismo y parlamentarismo, que se transformó en una Guerra Civil en 1891, tras aprobar Balmaceda el presupuesto de la nación sin la firma del Congreso. Derrotadas sus fuerzas en las Batallas de Concón y Placilla, se suicidó el 19 de septiembre de 1891 en la legación argentina.
Orozimbo Barbosa
Al estallar la guerra civil de 1891, Barbosa se convirtió en uno de los más entusiastas partidarios del presidente Balmaceda, encabezando los servicios de seguridad encargados de reprimir a los opositores al presidente Balmaceda. La persecución de éstos adquirió un tinte especialmente sangriento el 20 de agosto de 1891, cuando ordenó el fusilamiento de 84 jóvenes contrarios a Balmaceda que habían intentado sabotear las líneas férreas para impedir la llegada de las tropas balmacedistas a Quintero, donde había desembarcado el ejército revolucionario.
Junto al general José Miguel Alcérreca dirigió al ejército balmacedista en la batalla de Concón, en la que venció el bando constitucionalista. El 28 de Agosto encontró la muerte en el combate de Placilla, que selló el triunfo del Congreso y puso fin a la Guerra Civil de 1891.
Juan Williams Rebolledo
A fines de 1879 Juan Williams Rebolledo fue nombrado miembro de la junta de asistencia y en 1886 fue nombrado intendente y comandante general de armas de Valparaíso. El 21 de enero de 1889 fue nombrado director de la Escuela Naval y en marzo de 1890 fue nombrado Comandante General de Marina, permaneciendo en el cargo hasta el 24 de enero de 1891. Durante la Guerra Civil de 1891 apoyó al gobierno de José Manuel Balmaceda y triunfante de la revolución fue dado de baja de la marina.
Juan José Latorre
En diciembre de 1882 fue enviado a Europa en comisión de servicio y el 6 de junio de 1884 ascendió a Contraalmirante. El 29 de diciembre de 1886 regresó a Chile y en octubre de 1887 fue nombrado Jefe de la Comisión naval para dirigir la construcción de varias naves en Francia. Fue nombrado Comendador de la Legión de Honor de Francia y Comendador de la Cruz de de Santa Ana de Rusia. En 1889 fue nombrado Representante extraordinario de Chile en la Exposición de París y al estallar la guerra civil de 1891, apoyó desde Europa.
Santiago Amengual
En 1887 se retira definitivamente del Ejército, para en la Revolución de 1891 pelear en apoyo de la fuerza de Balmaceda, situación que le marcaría profundamente. Al pertenecer al bando perdedor, es expulsado del Ejército quedando en una condición económica precaria, siendo perseguido y acosado por los vencedores, hasta que en 1897 se le ve en el funeral del General Manuel Baquedano, vestido solamente con harapos.
Diego Dublé Almeyda
En Europa le sorprendió la guerra civil de 1891, en la cual se mantuvo fiel al gobierno de José Manuel Balmaceda. Triunfante la revolución fue dado de baja del ejército el 1º de enero de 1892 y ese mismo regresó a Chile. Se dedicó a la pintura, a la música y a la traducción de obras del inglés al castellano. En 1908 se le otorgó por gracia especial del Congreso el grado de General de Brigada y el título de Benemérito de la Patria. Falleció en Santiago el 6 de mayo de 1922.
José Miguel Alcérreca
Como miembro de la policía secreta se vio involucrado en múltiples casos de torturas y abusos de poder sobre reos políticos y el 17 de marzo de 1891 fue nombrado Comandante de la 2º División "Valparaíso". El l5 de mayo de 1891 ascendió a General de Brigada y al mando de su división luchó en la batalla de Concón el 21 de agosto de 1891. Luchó en la batalla de Placilla el 28 de agosto de 1891 y al término de la batalla fue reconocido por los soldados revolucionarios triunfantes y fue ultimado a balazos pese a su heroica resistencia.
Eulogio Robles Pinochet
Al estallar la guerra civil de 1891 apoyó al gobierno de José Manuel Balmaceda y fue nombrado Secretario y Ayudante General del Estado Mayor General. Al mando de una división derrotó a las fuerzas revolucionarias en el combate de Dolores el 15 de febrero de 1891 y en el combate de Huara el 17 de febrero del mismo año.
Luchó heroicamente en la batalla de Pozo Almonte el 7 de marzo de 1891, en donde fue herido en numerosas ocasiones. Fue retirado del combate por funcionarios de la Cruz Roja y fue asesinado bárbaramente por las tropas revolucionarias y su cuerpo destrozado sin piedad, bajo las mismas tiendas de la Cruz Roja.
Post Mortem ascendió a General de Brigada
José Luis Araneda Carrasco
Participa en la Guerra Civil de 1891 en el bando gobiernista, lo que le ocasiona su llamada a retiro tras el triunfo de las fuerzas revolucionarias en septiembre de 1891.
